Segunda Noche en Blanco de Málaga supera ampliamente el público de la primera

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La segunda edición de la "Noche en Blanco" de Málaga, constituida por un total de 80 actividades culturales diversas celebradas en la noche de ayer y madrugada de hoy como la apertura de museos a ese horario poco habitual, ha sido exitosa y ha superado ampliamente los 30.000 participantes de la primera.

Fuentes del Ayuntamiento malagueño, promotor de la iniciativa, así lo han asegurado hoy a Efe y han precisado que el programa -que se extendía durante siete horas en cerca de 70 espacios y con conciertos, representaciones teatrales y exposiciones- se ha mantenido pese a la lluvia, salvo el concierto de Russian Red, suspendido por ello al poco tiempo de empezar.

Colas en todos sitios como la extensa que había en la puerta principal de la Alcazaba o ante una de las novedades de esta edición, el Museo Picasso, que se ha sumado en esta ocasión, y resalta por la afluencia de público el concierto al aire libre de "Efecto mariposa", que superó los más de 2.500 asistentes en total.

Esta segunda edición, con la luz como hilo conductor, ha superado en más del doble tanto el número de actividades como de espacios para su desarrollo.

El programa ha incluido entre otras cosas una visita a la tramoya de una ópera en el Teatro Cervantes -que tuvo que abrir antes de lo previsto por las colas que había- y al Archivo municipal, en concreto a sus depósitos para ver los libros más protegidos en la actividad "Un archivo despierto", un recinto que ha congregado a más de mil personas y donde además hay una exposición de futurismo.

Por su parte, el Teatro Echegaray -que aún no se había abierto al público tras su rehabilitación- tenía previsto cinco pases y se tuvo que hacer uno más para que entraran todos los que había en cola.

También tuvieron gran reclamo los grafiti de luz -procedimiento por el que con una linterna se hacen dibujos en el aire que son fotografiados- que hacían los propios ciudadanos en la Plaza de las Flores o la instalación denominada "Atlantis", una casa con rasgos andaluces hundida en el río Guadalmedina de la capital para alertar de las consecuencias del cambio climático.

Es una creación del arquitecto Halldor Ulfarsson y la artista Tea Mäkipää, de Islandia y Finlandia respectivamente.

También han estado abiertas de noche la Casa Natal de Picasso o la rotativa del diario "Sur", se ha ofrecido un concierto de Clara Montes y estudiantes de Arquitectura han hecho una instalación junto al Banco de España.

Han participado instituciones y entidades privadas como la Diputación, Unicaja, la Sala Gades o el Ateneo y el programa ha sido impulsado por el Ayuntamiento, cuyo alcalde, Francisco de la Torre, ha recorrido varias lugares al acudir al Museo Picasso, Teatro Echegaray o Centro de Arte Contemporáneo entre otros.