M. ÁNGELES GONZÁLEZ
Los próximos dos años seguirán aumentando los parados inscritos en las oficinas de empleo y será necesario otro quinquenio para que Málaga se recupere y vuelva a los tiempos de bonanza económica. Así lo advirtió ayer el vicedecano del Colegio de Economistas, Antonio Pedraza, extrapolando a la provincia unas previsiones que en su día hizo la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Lejos de cualquier pesimismo, sin embargo, el ente profesional está convencido de que Málaga saldrá reforzada de la crisis «porque tiene un dinamismo y unas características innatas que la hace más capacitada para dar el salto que otras provincias españolas».
El primer Barómetro Económico de la Provincia de Málaga, presentado ayer por el decano del Colegio de Economistas, Juan Carlos Robles, y que cuenta con la colaboración de Analistas Económicos de Andalucía, augura un año complicado para la provincia, sin embargo, queda espacio para la esperanza, ya que la mejora en las comunicaciones y en las infraestructuras que se está produciendo en 2009 podrá hacer que «Málaga, que se ha caracterizado siempre por su gran dinamismo y por ser el motor de la economía andaluza, salga fortalecida de la crisis».
El estudio, de carácter trimestral y «una apuesta personal» del recientemente elegido decano del Colegio, constata «el progresivo empeoramiento de la economía» y advierte de que las perspectivas para este año «no resultan nada halagüeñas». Así, se anticipa una «significativa» caída de la actividad y el empleo y no descarta una evolución «algo más negativa que la del conjunto de la economía andaluza».
Impulso al turismo
Estas conclusiones se extraen tras un análisis detallado de diversos índices económicos que evidencian una caída del empleo en la provincia en el primer trimestre del 9,1%,superior a la media nacional (6,4%), así como un «vertiginoso» descenso de la contratación indefinida, que ha caído a la tercera parte de la media de 2008, según señaló el vicedecano del Colegio, Antonio Pedraza.
El turismo, principal motor de la economía malagueña, ocupa un lugar destacado en este barómetro, que confirma una bajada de los precios del sector hotelero del 10,2% de enero a marzo, lo que constata «el esfuerzo que está haciendo el sector para adaptarse a la crisis y a una demanda más reducida». En este sentido, Pedraza abogó por un mayor apoyo inversor de las administraciones públicas. «Es difícil cambiar nuestro modelo productivo, lo que tenemos que hacer es potenciarlo, mejorar la calidad el entorno y la seguridad porque hemos dejado de ser un destino barato y hay que competir», apuntó Pedraza, que resaltó que, mientras que Gobierno central y ayuntamientos han incrementado sus inversiones en la provincia, las de la Junta de Andalucía han descendido un 76% en el primer trimestre del año.
A pesar de este panorama poco optimista, el Colegio de Economistas observa pequeños indicios de recuperación, como el aumento de la confianza del consumidor y la bajada de los efectos impagados. Asimismo, la caída de los tipos de interés y de los precios podrían llevar a una reactivación del mercado inmobiliario al «reducirse el esfuerzo económico necesario para acceder a una vivienda».
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