Regresaban a casa después de hacer la compra en un centro comercial cuando un camión cisterna golpeó, arrastró y pasó por encima del vehículo en el que viajaban, que se incendió como consecuencia del accidente. Los dos ocupantes del turismo, un hombre y una mujer, fallecieron en el siniestro, ocurrido ayer en Marbella y en el que resultaron además heridas de carácter leve otras dos personas. Entre ellas, la conductora de un monovolumen sobre el que finalmente volcó el camión, que, según las primeras investigaciones, habría sufrido un problema en el sistema de frenado.
Los fallecidos son una mujer de 35 años, nacida en el País Vasco pero residente en Marbella, y su acompañante, un hombre que no portaba documentación en el momento del accidente y en cuya identificación trabajaba ayer la Policía Local. Los hechos tuvieron lugar sobre las 13.20 horas en la rotonda del área de servicios de La Cañada, en la que confluye la carretera A-355, que une Marbella con Ojén. Un cruce que constituye uno de los principales puntos negros del municipio en lo que respecta a siniestralidad.
Al llegar a la glorieta de acceso a la ciudad, el camión, que descendía por la carretera de Ojén, no pudo frenar y arremetió contra todos los vehículos que encontró a su paso. Primero colisionó contra un turismo, de la marca Toyota, al que golpeó en un lateral y cuyo conductor, un hombre de 30 años, sufrió un latigazo cervical como consecuencia del impacto. Pero lo peor estaba aún por llegar.
Según fuentes policiales, después del primer choque, el camión atravesó la rotonda y arrolló al segundo vehículo, al que arrastró durante varios metros antes de empujarle contra la calzada y, finalmente, pasar por encima del mismo. El roce contra la carretera habría sido el origen del incendio que sufrió el automóvil.
Hasta el lugar del siniestro se desplazaron efectivos de la Policía Local, Policía Nacional, Guardia Civil y del parque de Bomberos de Marbella, así como personal de los servicios de emergencias sanitarias del 061, que no pudieron hacer nada por salvar la vida de las víctimas. El vehículo, un turismo de la marca Opel, se había convertido en un amasijo de hierros como resultado de los impactos y de las llamas.
En lo que respecta al resto de la secuencia del accidente, tras golpear el margen derecho de la calzada, el camión retornó a la vía e impactó contra un tercer coche, un monovolumen Ford Galaxy, sobre el que finalmente volcó. Debido al primer impacto, el vehículo giró y se quedó en sentido contrario, por lo que el camión cayó sobre la parte del piloto. La conductora del turismo, una mujer de 50 años, sufrió un corte profundo en una mano, pero pudo abandonar el vehículo por su propio pie a través de la puerta del copiloto. «Ha sido un auténtico milagro que no le haya pasado nada grave», señaló a SUR un testigo del siniestro.
Lesiones de carácter leve
Los dos heridos fueron trasladados al hospital Costa del Sol de Marbella, donde un primer examen de sus lesiones constataba que no presentaban gravedad. Sin embargo, ambos estaban pendientes en la tarde de ayer de que se les practicaran diversas pruebas para descartar otras posible secuelas del accidente, según informaron a este periódico fuentes del complejo hospitalario.
Por su parte, los dos hombres que viajaban en el camión resultaron ilesos, aunque tuvieron que ser atendidos por los servicios sanitarios debido a un ataque de ansiedad, según fuentes del 061. El conductor, un joven vecino de Málaga, dio negativo en la prueba de alcoholemia y, según las primeras pesquisas, el tacógrafo registraba una velocidad inferior a los 80 kilómetros por hora en el momento del siniestro, a pesar de la inercia y del supuesto fallo de los frenos.
El camión pertenece a una empresa privada de saneamiento especializada en desatoros y sus ocupantes supuestamente regresaban de un trabajo, dado que la cisterna del vehículo no estaba vacía. Más de una treintena de efectivos participaron en las labores de atención y restablecimiento del tráfico tras el accidente, que provocó el corte de la circulación de la vía en sentido Marbella durante cerca de tres horas.
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