Tras ocho años cerrado, el teatro Echegaray abrió de nuevo ayer sus puertas al público malagueño. Cinco años de obras y 7,2 millones de inversión han devuelto el esplendor perdido a este edificio diseñado por Manuel Rivera Vera y que se inauguró en 1932. Los autores del proyecto de rehabilitación, el fallecido Francisco Peñalosa, Salvador Moreno Peralta y César Olano, han recuperado la fachada y la entrada original del teatro. El nuevo Echegaray nace como un espacio escénico versátil, con un aforo de 304 espectadores, que acogerá teatro, cine, música, danza y otras actividades.
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