El expositor que generó las colas más largas del Simed 2009 vendía los pisos más escasos y más codiciados de Málaga: las viviendas de protección oficial (VPO). A la entrada del salón, uno de los stands más extensos era el del Instituto Municipal de la Vivienda (IMV) del Ayuntamiento de Málaga. Para fomentar las visitas al Simed, este organismo municipal hizo coincidir con la feria la apertura de un plazo de inscripciones para el sorteo de 611 viviendas de VPO. La llamada fue todo un éxito: más de 5.000 personas solicitaron los formularios en cuatro días, de las cuales más de 500 cumplimentaron los trámites en la oficina de atención del IMV en la feria, según la organización del salón inmobiliario.
Los promotores acudieron a la duodécima edición del Simed con ofertas especiales para la feria. Algunos, como Reyal Urbis, aplicaban un descuento de 6.000 euros a quienes decidieran comprar un piso en la feria. Además, ofrecían otros 2.000 euros para aquellos clientes que atrajeran a otros compradores. Otros anunciaban descuentos que llegaban al 50%, y algunos promocionaban viviendas a precios propios de otra década, como 63.000 euros por un estudio en la playa de Chilches, en Vélez-Málaga.
Casi todos los promotores consultados coinciden en que los precios de la vivienda han tocado fondo o están a punto de hacerlo. Fuentes de la promotora malagueña Sando afirmaban que de las siete urbanizaciones que comercializaban en la feria, en cuatro no se plantean bajar más los precios. Mientras los comerciales trataban de cerrar ventas en los expositores, en la calle había una feria paralela: numerosos vendedores particulares llenaban de papeles con ofertas inmobiliarias los limpiaparabrisas de los coches.
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