La empresa Isofotón comunicará hoy a los sindicatos la presentación de un drástico ERE que superará, con mucho, los cálculos iniciales que manejaban los sindicatos. El expediente temporal de regulación de empleo, que tendrá que ser sopesado y autorizado por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, afectaría a un total 715 empleados -lo que equivaldría al 95% por ciento de la plantilla- por un periodo de 90 días.
Los planes de la compañía pasan por suspender temporalmente la producción aproximadamente durante cuatro semanas y repartir los días restantes a lo largo del 2009 para poder ir adaptando la producción a la demanda. Según apuntaron fuentes de la empresa se pretende así reducir el importante ´stock´ acumulado en las instalaciones de Málaga, detener la necesidad de compra y fortalecer su posición financiera, con el objetivo final de "consolidar el futuro de la compañía a medio y largo plazo".
Clima de diálogo. La compañía alega que tiene tomar esta decisión ante la situación de "paralización temporal" del mercado fotovoltaico por el cambio regulatorio en España y por las restricciones de crédito a la financiación de proyectos fotovoltaicos, causadas por la actual crisis financiera internacional. La poca capacidad de liquidez de los clientes de Isofotón para afrontar proyectos fotovoltaicos en España y en los principales mercados internacionales que se espera durante los cuatro primeros meses de 2009 hacen necesario, señalan las fuentes, plantear esta suspensión temporal que permita adecuar la producción a la demanda actual y "evitar un fuerte crecimiento de ´stock´ no financiable".
Pese al tremendo impacto sobre el empleo, las mismas fuentes de Isofotón reiteraron su plena confianza en mantener el "clima de diálogo, respeto y entendimiento" que siempre ha tenido con los empleados. La compañía espera que la actual situación del mercado fotovoltaico a nivel mundial es sólo coyuntural y responde a causas financieras, por lo que espera que en el segundo semestre de 2009 el sector recupere su actividad en los principales mercados internacionales. Uno de los puntos que apoyan esta previsión es el hecho de que, una vez que el nuevo Real Decreto empiece a funcionar, se contempla en España una capacidad de 500 megavatios de nueva potencia instalada para este año.
Isofotón recuerda que en los últimos seis meses de 2008 se logró una reducción de costes estructurales de un 28% para aumentar la competitividad de la compañía, algo que a su juicio, "garantiza la posición competitiva de Isofotón cuando se produzca la recuperación del mercado".
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