El Málaga sigue creciendo
Málaga, (EFE).- El Málaga fulminó al Almería con dos goles, uno de bella factura por parte del centrocampista Francisco Portillo, y consiguió su segunda victoria del campeonato ante un Almería que sólo tuvo dos ocasiones, y volvió a perder en la segunda parte como ocurrió en anteriores encuentros.
No especularon ninguno de los dos equipos al comienzo del partido. El Almería, con Rodri, Suso y Aleix Vidal arriba, y el Málaga, jugando con rapidez por las bandas, sobre todo por la derecha, donde Portillo y Gámez, rompían por velocidad a sus marcadores. En un centro del primero, Duda cabeceó, pero en última instancia despejó Nelson.
Portillo hacía daño entre líneas y un pase picado dentro del área lo conectó el delantero holandés El Hamdaoui, pero su disparo se marchó fuera.
El conjunto malaguista tenía atosigado a su rival y otra internada, esta vez por la izquierda, significó un lanzamiento del lateral portugués Vitorino Antunes, que hizo intervenir al guardameta Esteban.
El equipo almeriense no tenía llegada. Era difícil por la presión de los jugadores blanquiazules en el centro del campo, aunque en alguna ocasión, esporádica, intentaba acercarse a la portería del centenario guardameta Willy Caballero.
El encuentro bajó de intensidad tras unos minutos trepidantes, sobre todo de los locales, aspecto que aprovechó el Almería para digerir, tranquilizarse y dormir el balón. Lo hizo perfectamente ante un Málaga que se iba diluyendo poco a poco.
Y a punto estuvo de inaugurar el marcador el conjunto almeriense tras un saque de esquina de Suso y Pellerano, sólo en el área pequeña remató y se encontró a Caballero, que despejó con las piernas. Esta acción despertó algo al Málaga, que volvió al ataque, pero demasiado alocado y sin excesiva precisión.
El Hamdaoui volvió a rematar un centro de Gámez, por la derecha. Era el minuto 39, casi treinta minutos después. Esa fue la respuesta malaguista al control del Almería. Y seguidamente respondió Rodri, con una internada, que no supo materializar con todo a su favor. Tampoco lo hizo Portillo, cuyo disparo al borde del área se marchó fuera.
Tras el descanso, misma sintonía del Málaga, llegadas al área del Almería, pero sin pegada y precisión. El conjunto almeriense hacía su juego sin despeinarse, lo tenía controlado y ni se inmutaba con los chispazos malaguistas. Sabía y creía que alguna ocasión iba a tener y la iba aprovechar.
Quince minutos de la segunda parte y el monólogo comenzaba a ser intenso para el Málaga. Duda, partícipe en dos acciones, un disparo que frenó Esteban y un pase del portugués lo remató El Hamdaoui con un escorzo y su remate pegó en el poste. No se amilanó el Málaga que buscaba el gol con dos lanzamientos de Darder, fuera.
El gol tenía que llegar de alguna manera, porque el Málaga era muy superior. Fue tras tres saques de esquinas lanzados por duda, el tercero, lo peina Sergio Sánchez y el centrocampista argentino Fernando Tissone, remata de cabeza en el segundo palo, consiguiendo el primer gol y su primer gol en España, tras jugar en el Mallorca y ahora en el Málaga. Era el minuto 68.
El Almería se la jugó, cambios de su técnico Francisco, al entrar Oscar Díaz y Corona, y una ocasión clara en un córner, que remató Aleix Vidal y paró Caballero. Fue la primera y única de los visitantes hasta el momento en el minuto 72.
El partido fue decayendo de fuerza, el Málaga aguantaba y el equipo almeriense quería pero no podía. Y para cerrar la fiesta, Portillo, culminó la sentencia en el descuento con un gran gol, con lanzamiento por toda la escuadra.
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